Una canción por Francesco Cardarelli (el 19 de noviembre 2021):
https://soundcloud.com/user-758010414/luna-e-sole-feat-lj
«L’Amore Domina Senza Regole » (“Love rules without rules”) – «From Scratch» (Netflix)
«Tu único defecto es no despertar a mi lado.»
Una historia de amor, aventura y distancia.
Madrid, España (junio 2021)
Sólo había conocido a Taylor, mi amiga americana, más o menos una semana antes de que ella quisiera presentarme a un chico italiano. Taylor no me mostraba fotos, solo me decía un nombre – Francesco. Poco sabía, que ese nombre empezaría a significar tanto para mí.
Estuve en Madrid para una pasantía y él estuvo allí para su Erasmus.
Un sábado por la noche en junio, mi grupo de amigos tomamos el metro a Casa de Campo para un botellón y aquí fue donde vi por primera vez a Francesco. Él estaba con otro chico, Valerio, y me recuerdo pensando ‘ah, espero que el chico que Taylor mencionaba sea el otro jajaja’. Valerio es muy guapo, pero Francesco me atraía por una razón que ahora comprendo.
En el parque, de Casa de Campo, después de tomar algunas copas, finalmente Francesco empezó a hablar conmigo. En mi español chapurreado, hablamos sobre su tiempo en España, mi país e Italia. No paraba de decir “Nice” en inglés a la mayoría de las cosas que él decía sobre Italia, que es “Figo” en Romano, una frase que sería muy importante en mi vocabulario. Yo estaba nerviosa por mi nivel de español.
Francesco me presentó al grupo de italianos, algunos pensaban que era de Noruega. En todo el tiempo que llevo en España no creo que nadie haya adivinado que soy de Escocia. Una chica escocesa es algo raro de encontrar en otro país.
Francesco tenía tres días más en España cuando le conocí. Aquellos tres días fueron un torbellino emocional.
«Disfruta Madrid» enfatizó cuando se marchó al aeropuerto.
Me encantaba mi aventura en Madrid, pero mientras, pensaba en un chico de Roma.
Roma, Italia (augusto 2021)
Obviamente, el objetivo de Taylor aquella noche de junio no fue que pasaremos un año y medio juntos. Sin embargo, sé que a veces conoces al azar a las personas que más te influyen.
En agosto, antes de regresar a Escocia, volé a Roma.
¡Qué locura! Alojarse en casa de la familia de un tipo que había conocido durante tres días en otro país. Además, no hablaba nada del idioma, era vegetariana en un lugar obsesionado con la carne, los mosquitos me adoraban y todo eso durante una pandemia. Aun así, nunca me he sentido más cómoda con un hombre en mi vida.
No puedo explicar el sentimiento de explorar Roma con un hombre italiano, ser una “Passenger Princess” en el coche al pasar por la Piazza del Popolo, y que un italiano te cocine una carbonara vegetariana.
Mis nueve días en Roma en el augusto de 2021 fueron más de lo que jamás hubiera imaginado. La última noche antes de volver a Escocia supe que tenía que hablar con Francesco sobre nuestra relación. ¿Quería estar en una relación a distancia o incluso intentarlo?
Esa noche, Francesco me enseñó una de sus “chiccas”, que significa ‘gema’ en italiano. Era una ilusión óptica de la basílica de San Pedro en una calle cercana a Villa Doria Pamphili. Era preciosa. Me sentó para contarme sus pensamientos. Habíamos pospuesto hablar de lo que sentíamos. En mi cabeza había ensayado todo lo que quería decir, pero no dije nada. Sus palabras estaban llenas de una honestidad brutal sobre los retos de la larga distancia. Mientras las lágrimas empezaban a rodar por mis mejillas, pensé que no quería ni intentarlo. Pero me sorprendió como siempre, confesándome que tenía miedo pero que quería intentarlo.
“I want to try”
Esas palabras significaron todo para mí.
Alcalá de Henares, España (febrero-mayo 2022)
En febrero de 2022 perdí a mi abuelo mientras estudiaba en Alcalá de Henares. Me volví muy introvertida. Me costaban mucho las clases de español en la universidad y la enseñanza. Le robaron el bolso a mi madre en la Gran Vía cuando mi familia vino a visitarme. Me resultaba muy difícil integrarse y hacer amigos de verdad.
La única constante en todo aquello y con quién me sentía más segura era Francesco.
La primera vez que Francesco vino a quedarse conmigo en Alcalá de Henares fue para mi 22 cumpleaños, una semana después de que falleciera mi abuelo. Hacía dos meses que no le veía. Creo que nunca he necesitado tanto sus abrazos.
Hizo que esos momentos difíciles fueran un poco más llevaderos.
Me mimó por mi cumpleaños con una botella de ginebra llamada “Laura Gin” (mi mote en España). Me dijo que tenía que tomar un chupito de ginebra por cada regalo. Este hombre estaba claramente intentando emborracharme… funcionó. Mi regalo favorito fue el anillo de su abuela. Me lo dio y me dijo “ella me dijo que se lo diera a mi mujer o a mi primera novia”. No creo que seas mi esposa, pero siempre serás mi primera novia”.
Volvía a haber esa honestidad brutal, pero llegué a adorarla. Necesitaba eso en mi vida, su honestidad y comunicación eran algo que nunca había experimentado en un hombre. Aunque a veces mi comunicación no era buena, él me entendía mejor que yo misma.
Mi país natal, Escocia (septiembre 2022)
Después de un año junto a Francesco, más o menos había conocido a toda su familia directa, conocía a todos sus amigos, había caminado por las calles en las que creció y comido en los lugares donde él compraba gelato. Pero él sólo me había oído contar historias similares de todos estos fragmentos de mi vida. Todavía él no había visitado Escocia.
En su defensa, yo había estado estudiando en el extranjero durante un año y luego había pasado el verano en Estados Unidos, pero debo admitir que me costó mucho convencerle para que finalmente se sacara el pasaporte y pudiera venir a visitarme a la soleada Escocia.
Mi noche favorita con Francesco en su primer viaje a Escocia estuvimos en Edimburgo. Hice una reserva en un restaurante escocés de comida casera llamado ‘Makars Mash Bar’ cerca de ‘The Mound’ en el centro de la ciudad. La comida era muy sabrosa y me sentí orgullosa de ver a un hombre italiano disfrutando del mash y la ternera de Escocia. A pesar de que soy vegetariana.
Francesco estuvo en Escocia durante un momento histórico.
Mientras cenábamos, mi móvil empezó a sonar. La llamada era del bar Johnny Walker, dónde teníamos nuestra siguiente reserva. La Reina de Gran Bretaña había muerto y el bar cerraba temprano en señal de respeto. Dijeron que si podíamos llegar en los próximos diez minutos aún nos servirían. “De acuerdo entonces” pensé.
Con el estómago lleno y bajo una lluvia torrencial, arrastré a Francesco a probar algunos de los mejores whiskies de Escocia.
Roma, Italia (diciembre 2022 – enero 2023)
Cuando empiezas un nuevo año, no te gustaría empezar con una decepción. Sin embargo, a menudo la vida no es amable y necesitamos tomar decisiones difíciles motivadas por su lógica egoísta. Decisiones que no tienen sentido pero que, al mismo tiempo, proceden de la lógica. Decisiones que no queremos tomar, pero que tomamos de todos modos.
Aún me pregunto si fue la decisión correcta.
Querido Franco:
Esos últimos días en Roma contigo fueron los más desafiantes en nuestra historia. Las luchas y las lágrimas contrastadas por tus besos y la sensación de tu tacto en mi piel. Me alejabas porque pensabas que así todo sería más fácil. Pero al final siempre decías lo siento cuando sabías que te habías equivocado. Te lo agradeceré siempre.
La mañana en que me llevaste al aeropuerto fue la festividad de la Epifanía y tu madre me regaló ‘una befana’, una bruja que trae regalos o dulces a los niños la mañana de la Epifanía. Mi befana de juguete tenía un bolsillito lleno de chocolate para el vuelo. Decirle “hasta luego” a tu madre fue el comienzo de lo que sabía que iba a pasar ese día.
En el coche me dijiste que fingiera que esto era como cualquier otra vez que me llevabas al aeropuerto, pero no lo fue. En todo caso, sentía una extraña sensación de déja vu, como la primera vez que salí de Roma.
¿Y si hemos tomado la decisión equivocada?
Te echo de menos.
Autora: Laura Jane Henderson (Dundee, Escocia)